La rigurosa expulsión de Joselu Guerra a los 11 minutos de partido condicionó el duelo entre el Unión Popular de Langreo y el Deportivo Fabril. El conjunto gallego aprovechó su superioridad numérica durante 80 minutos para llevarse la victoria por 0-3. Carreira y Manu Ferreiro mandaron al filial deportivista al descanso con dos goles de ventaja. En el segundo acto, Fabián puso el 0-3 definitivo en un contragolpe.
El Unión Popular de Langreo volvía a Ganzábal tras haberse quedado con la miel en los labios en Pasarón. Quería refrendar esas buenas sensaciones como local, con un triunfo ante el Deportivo Fabril. El partido comenzó con una clara ocasión para los de Pablo Acebal. A los 5 minutos Sergio Dacal puso un balón al segundo palo desde la derecha. Tras una peinada el balón le cayó a Omar Álvarez, que exigió al guardameta visitante con una volea al palo corto. Iba a ser la única ocasión del primer tiempo para los langreanos, porque en el 11 llegaría la acción clave del partido. Joselu Guerra y Garrido se disputaron un balón dividido. El centrocampista del Unión fue al suelo, sin aparente peligro ni fuerza excesiva. Pero el colegiado detuvo el partido y le sacó la roja directa, ante la incredulidad de jugadores y aficionados. Una acción en medio campo le costaba la expulsión al jugador del Unión, muy condicionado para el resto del partido. Con uno menos los de Pablo Acebal resistieron hasta el 37. Ahí Carreira desniveló la balanza con un potente disparo desde la frontal. Y en el 44 Manu Ferreiro iba a complicar el escenario aún más. Recibió a la espalda de la defensa, recortó a Adrián Torre y puso el segundo en el electrónico.
En la segunda parte pudo recortar distancias el Unión Popular de Langreo. Juan López dio el susto en una falta lateral que se fue cerrando sin encontrar rematador, y que a punto estuvo de sorprender al guardameta deportivista. Pero los de Manuel Pablo iban a aprovechar un contragolpe para matar el partido. Fabián culminó en el mano a mano, acabando con las esperanzas de los langreanos. Orviz tuvo la última ocasión de peligro en un córner. Recogió el balón suelto y lo intentó con un remate de primeras a la media vuelta, pero no encontró portería. Excesivo castigo para los langreanos, que se fueron muy descontentos con la labor arbitral. No sólo por la acción de la expulsión, si no por el trato recibido durante los 90 minutos por el trío arbitral, con constantes desaires y faltas de educación hacia el cuerpo técnico y los jugadores locales.
